30 de abril de 2012

Un poema más

He mirado al futuro,
y lo he visto tan claro,
que ahora que ha llegado
me parece recuerdo lejano,
pues, ¿qué es sino pasado
aquello que siempre supe yo?

Que la vida no regala
si no es para quitar,
aunque luego recompense
antes de volver a bajar,
y que todo lo que tomes
lo tendrás que retornar.

Hemos sido todo,
y no hemos sido nada.
Del todo que hemos sido,
nada ha quedado.
Mas del nada que fuimos
salió todo lo que somos.

Dale tiempo al tiempo,
para aprenderte la lección,
para pedirle al viento
una imposible explicación,
y que te canten las montañas
una historia que se olvidó.

Que no existe más realidad
que la realidad que existe,
y que no hay cosas más tonta
que los sucesos imposibles,
que los sueños del quizás
que quieren ser posibles.

No se olvida,
solo cambia de lugar
en la memoria
conserva su estar,
y aunque quieras borralo
de ti nunca se va.

Nunca olvides,
que no puedes olvidar,
que no existe
una nueva realidad,
que el viento
no puede contestar
y que el tiempo
no pasar por pasar,
que todo has sido
para a la nada volver,
que la vida
te quiere sin querer...

Cuando el futuro,
puedes averiguar.

1 de abril de 2012

Carta a quien la oiga

Mirame a los ojos si me ves. Sosténme la mirada, aunque sepas que escruto tu alma con ello. No te voy a juzgar, solo quiero ver tu historia, para poder decirte, sin mayores pretensiones, que te entiendo.

Te entiendo, y no te lo digo por consolarte. Te entiendo porque soy persona, como tú. Y puede que no de la misma forma, pero he pasado por lo que tú has pasado, y he odiado a la vida. He visto con impotencia como mis sueños se rompían, la gente se iba, los pedestales cedían, como mi cuerpo y mi mente se quebraban como el cristal.

Escúchame cuando te mire a los ojos. Te entiendo. Me han llamado loco por como vivo la vida, me han dicho que seguía un callejón sin salida, me han despreciado como a la mierda más miserable en el pie de la persona más abyecta de la faz de la Tierra. Me han odiado, insultado, pegado, herido, humillado.

Llora si quieres llorar. No te voy a juzgar por ello. Porque te entiendo. Yo también he amado y he visto como era rechazado. Me he sentido usado y utilizado. He visto como todas mis emociones las guardaban en una bolsa de basura con destino a un vertedero de corazones rotos. Me he sentido vacío, y nada ha merecido la pena.

Déjame que te abrace. Aunque tengas miedo. Te entiendo. Yo también he sido débil y he tropezado mil veces. Me he sentido solo. Solo. SOLO. Aún estando rodeado de gente. He visto como todos me miraban y señalaban preocupados, montando una algarabía sin sentido. Porque no me entendían.

Cálmate. No eres un bicho raro. O sino, lo somos los dos. Yo te entiendo. Se todo por lo que has pasado, porque la vida no es más que un conjunto de hilos de colores que sostienen a marionetas diferentes. Hay hilo color amor y color felicidad, color odio y color tristeza, color esperanza y color desesperanza. Y hay muchas marionetas, con cuerpos parecidos, pero cada una con una cara diferente...

Pero tú eres más que una marioneta.

¡Corta los hilos! ¡No dejes que solo la vida cuente tus historias! ¡Discute el argumento con el titiritero! Es TU vida. ¡Solo tuya! No dejes que te digan lo contrario. Eres TU. ¡Eso importa! Porque solo si eres tú podrás ser para los demás.

Se que a lo mejor en algún momento en tu vida perdiste la fe en el amor, en las personas, en los ideales, en las acciones, en ti mismo. Te paraste en el camino, entre un destino doloroso y un futuro incierto. Viste un cruce igual de negro en todas sus rutas. No te odies por ello. Si has sabido ver tu duda, es que estás en el buen camino, despues de todo.

No temas amar. ¿El amor que le diste a esa persona fue tirado? ¡NO! ¡Ese amor está ahí! Y va a volver a ti. Cuando amas, y amas de verdad, cuando amas al Amor y a alguien, el Universo entero estará de tu lado. El Universo es el mayor romántico que existe, y se compinchará contigo en secreto para acercarte a esa persona que se muere por conocerte. Abre tu corazón, y dáselo al que solo querría verlo feliz, desde lejos, toda la vida.

Mírame otra vez. ¿Estás sonriendo? ¿Aunque sea tímidamente? Es normal. A todos nos gusta esa sensación. Porque no me has leído a mi, ¿verdad? No has leído cuatro líneas genéricas mal escritas. Has leído TU HISTORIA, tu vida. Has leído al capullo de tu primer novio, dejándote tirada. Has leído a la chica que te despreciaba por no ser un modelo. Y has leído a esa persona que te abraza por la espalda, con la que cruzas tímidas miradas, esa persona que aún no ha aparecido, o que ha vivido contigo siempre. Prométeme que no la dejarás escapar, y que no la culparás si alguna vez te falla, porque te quiere. Y mucho.

Ahora si que es una sonrisa. Es normal. A todos nos gusta que nos digan esas dos palabras...

Te entiendo.