En Madrid contigo
el tiempo pasa mas despacio,
y no por mal lo digo,
pues a mi ritmo apresurado
este tiempo de relajo
es un feliz alto en el camino
En Madrid contigo
hablo con gran desparpajo
de lo que me ha acontecido
lo dolido y celebrado
lo incerto de lo vivido
y lo que aun no ha pasado
En Madrid contigo
escucho tu progreso
lo que a ti te ha sucedido,
y como vives todo eso
junto a quienes has conocido.
Y de tu aprendizaje aprendo
En Madrid contigo
hago cosas nuevas,
visito muchos sitios,
en el centro y las afueras
y hasta vuelo si me despisto
entre calles y carreteras
En Madrid contigo
me siento amparado,
acogido y querido,
y quizas reconciliado,
pues ahora lo recordado
gracias a tu mimo
es el tiempo atesorado
que pase en Madrid contigo
21 de octubre de 2018
7 de octubre de 2018
Desiderata cuadragésimo quinta: tres lugares
El mundo es todavía hermoso.
Hay un rincón en mi memoria,
lejos, lejos, lejos,
en el que empieza mi historia.
Es un paraíso terrenal,
bueno, bueno, bueno,
una guarida personal.
Hay un rincón en la realidad,
cerca, cerca, cerca,
del cual me quiero alejar.
Es un recuerdo decadente,
muerto, muerto, muerto,
de algo que fue diferente.
Hay un juego en esos versos,
truco, truco, truco,
¿lo has podido averiguar?
Es simple si lo digo:
obvio, obvio, obvio:
uno es el pasado del otro.
Hay un rincón en mi futuro,
¿real, real, real?
al cual intento llegar.
Es una esperanza,
real, real, real,
mi meta a alcanzar.
Ahí mi motivo,
razón, razón, razón,
para seguir mi camino.
Es diferente este tercero,
nuevo, nuevo, nuevo,
pero bello como el primero.
Hay farsas, y sueños fallidos,
pero, pero pero,
rendirse no es una opción
Es el futuro un tesoro,
bello, bello, bello,
pues el mundo es un lugar hermoso.
Hay un rincón en mi memoria,
lejos, lejos, lejos,
en el que empieza mi historia.
Es un paraíso terrenal,
bueno, bueno, bueno,
una guarida personal.
Hay un rincón en la realidad,
cerca, cerca, cerca,
del cual me quiero alejar.
Es un recuerdo decadente,
muerto, muerto, muerto,
de algo que fue diferente.
Hay un juego en esos versos,
truco, truco, truco,
¿lo has podido averiguar?
Es simple si lo digo:
obvio, obvio, obvio:
uno es el pasado del otro.
Hay un rincón en mi futuro,
¿real, real, real?
al cual intento llegar.
Es una esperanza,
real, real, real,
mi meta a alcanzar.
Ahí mi motivo,
razón, razón, razón,
para seguir mi camino.
Es diferente este tercero,
nuevo, nuevo, nuevo,
pero bello como el primero.
Hay farsas, y sueños fallidos,
pero, pero pero,
rendirse no es una opción
Es el futuro un tesoro,
bello, bello, bello,
pues el mundo es un lugar hermoso.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)